Este sorprendente artilugio, que bien podría parecer una máquina bélica, podría representar una ayuda importante para prestar auxilio en el mar. Samuel Adeloju es el ingeniero que lo ha inventado y el proyecto para llevarlo a término se llama Longbreach.
De este modo los vigilantes podrían ahorrarse acciones peligrosas y aquellos que precisan ayuda la recibirían más rapidamente.
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